Las versiones de Ubuntu desde sus inicios siempre han buscado mejorar en cada nueva versión, en su última revisión que es la 10.04 se propusieron mejorar el tiempo de arranque del sistema y llegaron a un tiempo de tan sólo 10 segundos.
Para lograr lo anterior deberán reducir, a su vez, el tiempo de carga del sistema de archivos temporal utilizado por el núcleo de Linux (Initramfs) antes que el sistema de archivos raíz logre ser montado, al tiempo que udev (el gestor que controla los ficheros de dispositivos) también será tocado por los programadores con el mismo objetivo.
La idea detrás de todos estos cambios es eliminar aquellas funciones innecesarias que retrasan el arranque del sistema, asignando tiempos determinados a cada proceso de arranque con el objeto de cumplir el objetivo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario